En la tarde del 23 de diciembre el Ayuntamiento de Getxo celebró por las calles del municipio la cabalgata del Olentzero, con música, con reparto de caramelos, etc. al estilo prepandemia, sin apenas restricciones excepto la obligatoriedad de llevar la mascarilla.

Sin embargo, a diferencia de Barakaldo y Portugalete, el Equipo de Gobierno de Getxo ha decidido cancelar la cabalgata de los Reyes Magos y mantener solo la recepción a los niños de Sus Majestades que muy pocos podrán disfrutar ya que las plazas se han agotado enseguida.

Son muchos los padres que han mostrado su indignación por la cancelación de la cabalgata de Reyes. Además, la idea de mantener la recepción a los niños en interiores (en el Getxo Antzokia y la Kultur Etxea de Romo) también ha sido criticada por carecer de sentido. La mayoría no entiende que se cancele una cabalgata al aire por la alta incidencia de Covid y al mismo tiempo se decida mantener los actos para los niños en lugares cerrados. «Estamos dejando de llevar a los niños a la guarde para meterlos ahora en un sitio cerrado a ver Los Reyes» se quejaba una ciudadana.

«Con el Olentzero no hubo aglomeraciones. Más peligro hay en el metro todas las mañanas pero ahí no pasa nada» protestaba otra.